En un contexto económico desfavorable para los municipios y la provincia, Victoria supo adaptarse a la realidad y llevar adelante un carnaval exitoso que viene creciendo. Con una convocatoria masiva, la edición 2025 del Carnaval “¡Oh, Capitalísima!” se convirtió en un verdadero suceso, reuniendo a más de 18 mil personas en sus dos primeras noches y consolidándose como uno de los eventos más importantes de la provincia.
Victoria se reafirmó como la Capital Provincial del Carnaval
Victoria tuvo sus primeras dos noches de show y convocó a unas 18.000 personas. La ciudad se reafirmó como la Capital Provincial del Carnaval.
El Carnaval de Victoria convocó a 18.000 personas en sus primeras dos noches de 2025.
Victoria, Capital Provincial del Carnaval
El corsódromo victoriense vibró con el desfile de las comparsas Batuque, Obrigado Batería, Samba Rey, Jarana, Caixendé Sambá y Terror do Corso, que desplegaron su energía, ritmo y color. La intendente Isa Castagnino, encargada de inaugurar la fiesta, destacó el esfuerzo realizado por la gestión municipal y la decisión de abrir la participación a inversores privados para sostener y mejorar el carnaval, a pesar del difícil contexto económico.
“La cultura es un gran motor de identidad y, también, de desarrollo. En momentos difíciles, más que nunca, apostamos a nuestra tradición carnavalesca, porque el carnaval es trabajo, es turismo y es alegría para nuestro pueblo”, expresó.
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Entre los asistentes, en la primera noche estuvo la vicegobernadora, Alicia Aluani, quien elogió la organización y reafirmó a Victoria como la capital provincial del carnaval. Además, a la segunda noche asistieron el senador y la diputada provincial, Víctor Sanzberro y Laura Stratta.
Lo más destacado es que, mientras otras ciudades con carnavales consolidados han registrado una baja en la concurrencia, Victoria logró un crecimiento notable en el público. La primera noche reunió a más de 8.000 personas y la segunda superó las 10.000, consolidando el impacto turístico y económico del evento.
El carnaval no solo representa un espectáculo de primer nivel, sino también una fuente de ingresos para cientos de familias. Comerciantes, emprendedores y trabajadores del turismo se vieron beneficiados por una celebración que reafirma la identidad local y proyecta a Victoria como un destino imperdible en la temporada estival.
Con noches aún por delante, la expectativa sigue en alza. El carnaval de Victoria no solo ha resistido los tiempos difíciles, sino que ha demostrado que el espíritu festivo de Victoria sigue intacto y más fuerte que nunca.